Maria Fernada Olea – Para crear un ambiente que tenga sinergia en ese día soñado se busca escoger un color que sea la base de las decoraciones, las cuales reflejen la personalidad de los novios y el estilo que buscan presentar.
El color que es usado de manera predominante es el blanco. El escenario decorado con este color proyecta un estilo puro y elegante que al mismo tiempo irradia juventud. Los arreglos florales también son en este color del mismo modo que en el tema de las mesas. Para darle mayor luminosidad se busca enfatizar las arañas de cristal.
Un color que no se pensaría que podría usarse en las bodas pero que se está volviendo tendencia es el negro. Este color es osado e impacta cuando se utiliza de manera adecuada en las decoraciones. Da un toque de sensualidad y elegancia que permite que el escenario general destaque.
Un color que está relacionada con el amor es el color rojo, el cual se presta para decoraciones que simbolicen el romanticismo y la pasión. Se puede optar por rosas rojas para los arreglos florales y en cuanto a las decoraciones de las mesas y el mismo local se busca que se complemente con otros colores como el dorado. Aquí puede jugar un papel importante la planificación de las luces para crear un ambiente romántico.
En cuanto a colores más femeninos, el color palo rosa o el mismo rosa son elecciones ideales para las decoraciones de una boda. A través de estos colores se expresa sensaciones de pureza e inocencia. Dentro de todo, le da un estilo dulce y afectivo al ambiente que se quiere proyectar.