Sake es la firma peruana que fusiona la biotecnología ancestral con el arte y la poesía. Con el objetivo de promover prácticas más sostenibles en la industria de moda, en los últimos diez años Ana Tafur, fundadora de la marca, viene investigando distintas regiones de Latinoamérica alternativas de biomateriales innovadores.
“SAKE nace de una necesidad de explorar la transparencia y el impacto en una cadena de suministro en el mundo de la moda. El proceso de investigación empezó con la idea de buscar materiales locales y trabajar con las comunidades nativas y rurales, preguntando, viajando y moviendome empecé a redescubrir todos estos procesos y materiales”, explica la Tafur a través de un comunicado.
Esta firma de moda de laboratorio rinde culto a la belleza natural y a las técnicas milenarias, se inspira en conceptos como los quipus de los Incas, que simbolizan la comunicación a través de nudos, y la metáfora del micelio, una red subterránea que alimenta y conecta al ecosistema del bosque.
Al refererirse de “biotecnología ancestral” Tafur habla del uso de técnicas tradicionales y conocimientos antiguos para desarrollar aplicaciones modernas en áreas como la medicina, la agricultura y, en este caso, la moda. Así, la creadora lleva los antiguos procesos que han sido transmitidos de generación en generación a su laboratorio con el objetivo de generar sus propias fórmulas y desarrollar materiales desde cero.
“Me decían: existe un material en la selva que es un biocuero, lo hace un nativo en su chacra, pues yo me iba para esta comunidad y buscaba a esta persona para aprender y ver como lo hacía, entender qué químicos y materiales se usaban, y ver si era viable hacerlo yo y mejorarlo en un laboratorio o desarrollar las capacidades del proveedor local para obtener un mejor producto” cuenta.
Sake se destaca por su enfoque vanguardista en el curtido de cuero, evita el uso de elementos tóxicos como cromo y plomo, empleando en su lugar tintes naturales. También recurre a nuevos materiales como la piel del paiche y látex de Shiringa, promoviendo así una economía circular y reemplazando los materiales tradicionales. “Hemos logrado mejorar el proceso de curtido sin la utilización de cromo, plomo, sulfuro o petróleo, en su lugar empleamos la semilla del árbol llamada «tara». Asimismo, estamos perfeccionando la técnica de extracción de látex de shiringa para evitar el uso de químicos contaminantes. Además, hemos colaborado con diversa comunidades indígenas y rurales en la utilización de técnicas ancestrales, como el uso de tintes naturales, hilado manual, telar de cintura, telar de pedal, telar de palito, crochet, semillas, fibras vegetales, algodón nativo y alpaca en sus colores originales, entre otros”, indica.
En la actualidad, la marca está trabajando en la iniciativa “Caravana Andina”, un proyecto desarrollado en colaboración con una asociación de artesanos, en los que se dictan talleres sobre habilidades productivas, tintes naturales y telar de pedal; además de brindar un fuerte apoyo desde el aspecto social.
Sake presentó este 20 de septiembre su colección en el Hub Designers for the Planet, del Milan Fashion Week. Se trata de una propuesta inspirada la influencia de cantos chamánicos, ícaros y materiales inspirados en ceremonias de Ayacahuasca.
Publicado Originalmente por : FASHIONUNITED