Polémicas con los animalistas de PETA al margen, la icónica casa romana Fendi volvía a brillar con luz propia en la primera jornada de desfiles oficiales de esta nueva edición de la Semana de la Moda de Milán. Pasarela desde la que la firma pasó a desvelar su nueva colección de mujer para la temporada Otoño/Invierno 2024/2025, firmada nuevamente por el británico Kim Jones, director creativo de las colecciones femeninas de la firma desde el pasado mes de septiembre de 2020.
Desde que fuera ungido como máximo responsable creativo de la firma italiana, posición que comparte con Silvia Venturini Fendi, miembro de la tercera generación de la familia Fendi fundadora de la casa, y quien se mantiene como directora creativa de las colecciones masculinas y de complementos, Jones ha venido firmado una indistinta serie de colecciones de prêt-à-porter y de Alta Costura, en torno a las que, a partes iguales, ha sabido a bien poner a dialogar las dos “pulsiones” que guían su mano para llegado el momento de idear cada nueva propuesta de la firma italiana. Unos instintos que le llegan de un lado de su propio imaginario creativo como diseñador de modas británico, y del otro de la propia herencia histórica de la casa Fendi como casa de modas romana. Unos orígenes que se remontan hasta los de su fundación en 1925 en la Ciudad Eterna como una pequeña tienda de artículos de piel y marroquinería, y para los que nos encontramos por tanto a las puertas de las celebraciones por el centenario de su fundación, y que son justamente los que han terminado por alumbrar esta última colección de Jones para la firma, inspirada en los diseños de la casa de 1984. Unos años en los que la firma, desde 2002 integrada dentro de la cartera del holding internacional francés LVMH, se mantenía ya bajo la dirección creativa del celebérrimo Karl Lagerfeld; responsable justamente de su revitalización después de que pasara a liderar en 1965 su departamento creativo. Unas tareas en las que se mantendría desde entonces y hasta el mismo momento de su fallecimiento en febrero de 2019, al tiempo que las compaginaba con la dirección creativa de Chanel, desde 1983, aportando a la casa romano trabajos tan destacados como el diseño de su emblema en forma de “doble F”, o sus modelos de la década de los 80. Unos diseños en los que Jones terminó por recalar en su viaje de descubrimiento entre los archivos de la casa, inspirándose en esa misma atmósfera contestataria del Londres de aquellos años que ya sirvió por entonces de inspiración al diseñador alemán.
“Estaba mirando los archivos de Fendi de 1984”, cuando “los bocetos” que descubrió entre la documentación de aquellos años, “me recordaron al Londres de esa época”, explica el mismo diseñador de modas británico a lo largo de unas declaraciones difundidas desde la propia casa de modas romana. Un atmósfera que destilaba el estilo inconfundible de “los ‘Blitz Kids’, de los ‘New Romantics’”, subculturas y tribus urbanas que llegaron para marcar la estética de aquellos años, junto a “la adopción de la ropa utilitaria, el estilo aristocrático, y el estilo japonés”. “Fue un momento en el que las subculturas y los estilos de la moda británica se volvieron globales, y absorbieron influencias globales”, pero “aún así”, dando paso a “una elegancia británica tranquila”, segura y que parecía llegar para lanzar el mensaje de que “me importa un comino lo que piensen los demás”. Una postura que, apostilla Jones, “es algo que me recuerda al estilo romano”.
Entre cortes kimono y la nueva tendencia “body shirt”
Sirviéndose de este modo del perfecto elemento y de la fuente de inspiración precisa que justamente le servían para terminar de afianzar su visión creativa, asentada sobre esa perspectiva de “fusión” entre la irreverencia y el “descaro” de la moda británica, con la fuerza atemporal de la moda italiana, Jones ha terminado por modelar la que es, hasta la fecha, una de sus más bellas y mejor trabajadas colecciones como director creativo de las propuestas femeninas de Fendi. Una colección que logra mantenerse brillantemente en pie entre la deconstrucción de las tipologías tradicionales de la indumentaria, y la recontrucción de los códigos propios e históricos de la casa Fendi como marca especializada en piel y marroquinería. Características a las que además Jones, siguiendo con esa “osadía” de la moda de los 80, e hilándola con la de la actual moda de 2024 y con tendencias como la del “no pants”, ha terminado sumando el body como prenda clave de toda esta colección, resumiendo en torno a toda ella todas las intenciones creativas y estilísticas que ha terminado por reflejar desde el conjunto de toda la propuesta.
Logrando de este modo, y de manera más que brillante, fusionar la ya de por sí más que heterogénea estética de la moda británica de los 80, con la eterna y serena belleza de la moda romana, y con el atemporal “saber hacer” de la industria manufacturera italiana, la colección se descubría sobre la pasarela asentada sobre una contenida paleta cromática de tonalidades otoñales, dominada por negros profundos y mates, verdes oliva y marrones borgoña. Coloraciones pesadas y rotundas que Jones terminaba haciendo vibrar enfrentándolas y combinándolas con amarillos pastel, marrones ocres, cianes, azules índigo y rosas. Tonos que se mostraron en forma igualmente rotunda de la mano de acabados monocromáticos, destacando así el valor sosegado y tranquilo de una propuesta que terminó cediendo todo el protagonismo de las prendas a su materialidad y a sus patrones, así como a la combinación de colores conseguida desde la combinación de los propios diseños. Contando como únicos elementos de excepción a esta nota, de un lado el estampado de lunares utilizado como elemento destacado en distintas prendas, y del otro las ilustraciones de estatuas romanas, inspiradas en obras restauradas mediante trabajos financiados por la misma casa Fendi, que se han plasmado sobre una indistinta serie de modelos.
Contando para todo ello además con una honda y marca influencia oriental, explotada desde esa estética heterogénea extraída de la escena de la moda británica de los años 80, como piezas clave de la colección se descubren los abrigos y chaquetas en corte kimono, pero de líneas aristocráticas; los cuerpos en inspiración corpiño, pero construidos en finos paños de tela; o los distintas y llamativas prendas “fusión”, desde las que Jones deconstruye y reconstruye jerséis que se convierten en chaquetas tipo sastre, chaquetas que evolucionan en jerséis, o jerséis que se convierten en vestidos o en capas. Debiendo de poner en una nota al pie la destacada presencia de los bodies, que el británico nos devuelve en forma de jerséis de manga y cuello alto, imprimiendo una nueva evolución sobre esta tendencia de los “no pants” y de los sujetadores vistos, que amenazan con seguir estando en boga durante este 2024, y para las que ahora además Jones suma esta tendencia “body shirt”, para a partir de la próxima temporada Otoño/Invierno FW24.
Publicado Originalmente por : FASHIONUNITED