En el vertiginoso mundo de la gastronomía, donde los sabores y las experiencias son clave, el marketing y las relaciones públicas juegan un rol fundamental. Carolina Biggio, especialista en marketing gastronómico y relaciones públicas, ha sido testigo y protagonista de la evolución del sector en el Perú. Con una trayectoria que abarca más de una década en establecimientos icónicos como «Brujas de Cachiche» y el bar «Huaringas», su experiencia es un testimonio de cómo la estrategia y la creatividad pueden transformar un negocio culinario.
Del pisco sour a la estrategia de marca
«Trabajé casi 13 años en ambos lugares y aprendí muchísimo», recuerda Carolina. «Brujas de Cachiche era un referente de la gastronomía peruana, mientras que Huaringas se convirtió en un punto de encuentro gracias a su innovadora coctelería con pisco. Hicimos famoso el pisco sour de maracuyá». Estas experiencias le permitieron desarrollar un enfoque estratégico para posicionar marcas, un aprendizaje que hoy aplica en la consultoría de restaurantes y bares.
El marketing gastronómico: creatividad y tendencia
Cuando se trata de estrategias exitosas, Carolina destaca la importancia de la innovación. «El cambio de menús por estación, los lanzamientos semanales de platos sugeridos por el chef y las noches temáticas son claves para atraer y fidelizar clientes». Además, el uso de redes sociales y colaboraciones con influencers locales han permitido que muchos restaurantes se posicionen con mayor fuerza en el mercado. «La clave está en elegir a los creadores de contenido adecuados, aquellos que realmente conecten con la audiencia del restaurante», enfatiza.
Adaptarse y reinventarse en tiempos de crisis
El impacto de la pandemia fue un golpe duro para el sector gastronómico y, como muchos, Carolina tuvo que adaptarse. «Perdí a todos mis clientes y fue un momento muy difícil», confiesa. Sin embargo, en medio de la incertidumbre, surgió una nueva oportunidad: «Fui convocada por una empresa de bebidas y comenzamos a trabajar estrategias digitales con influencers. Fue así como descubrí el poder de los creadores de contenido y me reinventé dentro del mundo digital».
El equilibrio entre la vida profesional y personal
Ser madre de dos hijos y liderar una carrera demandante es un desafío, pero Carolina ha encontrado la fórmula para equilibrar ambas facetas. «La organización es clave. Establezco horarios y los respeto, priorizo actividades y delego cuando es necesario. Eso me permite disfrutar de tiempo de calidad con mis hijas sin descuidar mi trabajo». Su consejo para otras madres emprendedoras es claro: «Manténganse actualizadas en tendencias digitales y gastronómicas. La innovación es esencial para destacar».
Empatía y relaciones públicas: la fórmula del éxito
Más allá de las estrategias de marketing, Carolina destaca la importancia de la empatía en su trabajo. «Escuchar las necesidades de cada cliente antes de proponer estrategias es fundamental. Lo mismo ocurre con los medios de comunicación: conocer sus intereses y tiempos permite construir relaciones genuinas y duraderas», explica.
El boom de la gastronomía peruana en el mundo
El reconocimiento internacional de la cocina peruana no es casualidad. «Además de su calidad y diversidad, ha habido un trabajo estratégico de marketing y relaciones públicas. Campañas como Perú Mucho Gusto de PromPerú, el posicionamiento de restaurantes en The World’s 50 Best Restaurants y el storytelling de chefs como Gastón Acurio o Virgilio Martínez han sido claves», señala Carolina. «Hoy, plataformas como Instagram y TikTok han ayudado a viralizar nuestra gastronomía y a convertirla en una experiencia global».
Aprendizaje continuo: la clave del crecimiento
Para Carolina, el aprendizaje nunca se detiene. «Siempre me matriculo en cursos de periodismo gastronómico, inteligencia artificial y marketing digital. La formación constante es vital en un mundo que cambia rápidamente». Su pasión por la innovación y su capacidad de adaptación la han convertido en una referente del marketing gastronómico en la región.
Con una carrera en constante evolución y una visión estratégica del sector, Carolina Biggio demuestra que la gastronomía no solo se saborea, también se comunica, se vive y se proyecta al mundo.